El 10 de abril de 1912, el Titanic inició su viaje inaugural partiendo desde Southampton (Inglaterra) con destino a Cherburgo, Queenstown y finalmente a Nueva York. Cuatro días más tarde, el buque chocó con un iceberg al sur de las costas de Terranova, y se hundió terminando con la vida de 1.517 personas.
El New York Times anuncia el hundimiento del transatlántico en su edición del 16 de abril de 1912.
El Titanic amarrado
en el muelle de la
White Star,
en Southampton,
engalanado con
banderas. El Viernes Santo 5
de abril de 1912,
cinco días antes de
emprender su viaje
inaugural.
Una de las primeras secuelas del impresionante y legendario crucero de lujo “Titanic”, llevaría su historia a la gran pantalla, en el año de 1943, contando una trama bastante interesante, pero a la vez cruda para la época.
Titanic es una película
alemana de 1942, dirigida por
Herbert Selpin. Es una película de
propaganda política nacionalsocialista que trata el tema del hundimiento del
transatlántico de lujo
RMS Titanic.
La película muestra la catástrofe desde un punto de vista de propaganda anti-británica. La compañía naviera
White Star Line está a punto de caer en la bancarrota y por lo tanto soborna al capitán
Edward John Smith para que cruce el Atlántico en un nuevo tiempo récord. De esta manera, la compañía naviera obtendrá la codiciada
banda azul, que denota al barco más rápido en cruzar el
océano Atlántico, salvando a la compañía de la ruina. Sólo el primer oficial, un alemán de apellido Petersen, reconoce el peligro, pero sus advertencias son ignoradas. Durante el hundimiento los pasajeros ricos, incluyendo el presidente de la naviera,
Bruce Ismay, tratan de sobornar al capitán para obtener un lugar en un bote salvavidas. Los pasajeros y miembros de la tripulación de origen alemán, demuestran el mayor valor y carácter durante el hundimiento. Al final de la película, en la escena de un juicio, el primer oficial Petersen acusa al presidente de la naviera Ismay de ser el principal responsable de la catástrofe. La comisión judicial rechaza su punto de vista, alegando de que el fallecido capitán Smith tenía la última responsabilidad sobre el mando del barco. Entre las tramas secundarias hay varias historias románticas con situaciones de amor verdadero, viejos amores, nuevo amor, triángulo amoroso, compromiso, casamiento y sacrificio
La película falsifica los orígenes y el curso que siguió la tragedia. No hay pruebas fidedignas de que el
RMS Titanic navegara hacia el desastre en busca de un récord de velocidad. Tampoco es cierto que la naviera
White Star estuviese al borde de la bancarrota, de lo contrario la compañía no hubiese existido hasta 1935, cuando se fusionó con la
Cunard Line.
El director,
Herbert Selpin, fue encarcelado durante el rodaje de la película por declaraciones negativas sobre la
Wehrmacht. Según las autoridades, fue encontrado muerto en su celda el 1 de agosto de 1942. Nunca quedó claro si fue suicidio o asesinato. La película fue terminada bajo la dirección de Robert Klinger.
Cuando la película estuvo finalmente lista para ser exhibida, la guerra se había desarrollado desfavorablemente para Alemania.
Joseph Goebbels temió que hubiera asociaciones derrotistas y comparaciones entre el hundimiento del
Titanic y el hundimiento del
Tercer Reich, por lo que no permitió que fuera exhibida en Alemania. Sólo fue proyectada en los países ocupados.
Las escenas de la noche del hundimiento y las escenas de la cubierta del Titanic fueron filmadas en el buque alemán
Cap Arcona. En 1945 el
Cap Arkona fue bombardeado por aviones aliados en la bahía de
Lübeck. El barco estaba transportando a prisioneros de
campos de concentración y se estima que entre 3.000 y 3.500 murieron en su hundimiento, más del doble de las víctimas del desastre del
Titanic.
Cuatro escenas de esta película fueron utilizadas en la película
A Night to Remember, sobre el mismo tema, filmada en 1958.
<><><><>
<>

</>
</></></></><><><><>
</></></></>
El Accidente del Titanic ha sido el hundimiento que más adaptaciones ha conocido para el cine, Algunos de los filmes que recrean el hundimiento son los siguientes:
“TITANIC” (1997) de James Cameron
Titanic es una película romántica escrita, producida y dirigida por James Cameron en 1997 sobre el hundimiento del RMS Titanic. Está protagonizada por Leonardo DiCaprio y Kate Winslet como “Jack Dawson” y “Rose DeWitt Bukater” respectivamente, miembros de diferentes estratos sociales que se enamoran durante el fatídico viaje inaugural del barco en 1912. Los personajes principales y la historia de amor son ficticios, pero muchos de los personajes secundarios (como los miembros de la tripulación y algunos de los viajeros de primera y segunda clase) están basados en personajes históricos reales, así como las tomas del barco en fondo del Atlántico que abren la película
La película tuvo un gran éxito de crítica y público, ganando 11 Óscars, incluyendo la categoría “Mejor Película”, y convirtiéndose en la película más taquillera de la historia, con una recaudación mundial total de 1.800 millones de dólares.
“LA CAMARERA DEL TITANIC” (1997) de Bigas Luna
La película está ambientada en Francia 1912 y su sinopsis es la siguiente: Horty, un joven obrero que trabaja en una fundición, gana el primer premio en el concurso anual de fuerza que organiza la empresa: un billete de ida y vuelta para ir a Southampton a ver la partida del Titanic.
Durante la noche, en su habitación del Gran Hotel de Southampton, llaman a la puerta: una hermosa muchacha le pide alojamiento. Es una camarera del Titanic: debe embarcar al día siguiente y todos los hoteles de la ciudad están completos.
A la mañana siguiente ella ha desaparecido. Horty la ve en el Titanic, intenta acercarse, pero el barco zarpa. Pero el joven consigue una foto de la hermosa Marie…
El director se centra en algun momento en los efectos especiales más que en la propia trama de la pelicula, pero está muy conseguida y es muy amena.
“RESCATEN EL TITANIC” (1980) de Jerry Jameson
Esta pelicula tenía una seríe de efectos especiales que con el tiempo han perdido todo su valor y la sinopsis no era del todo concreta:
Para llevar a cabo la elaboración de un sistema antimisiles, un grupo de científicos necesita un metal poco frecuente cuya única reserva fue, parece ser, embarcada a bordo del Titanic con destino a Nueva York en abril de 1912. Pero el buque se hunde al chocar con un iceberg.
Ahora el stock del metal se encuentra a más de 3.600 metros de fondo, en las aguas heladas del Atlántico norte. Dirk Pitt y un equipo de técnicos y de oceanógrafos intentarán llevar a la superficie todo el acero hundido en el fondo marino
“LA ULTIMA NOCHE DEL TITANIC” (1957)
El novelista Eric Ambler adaptó el libro del historiador Walter Lord que relata minuciosamente la última y trágica travesía del lujoso barco de pasajeros Titanic, que se hundió en las frías aguas del Atlántico norte en abril de 1912. Se dice que a pesar de sus limitaciones, es la mejor pelicula documental sobre la tragedia.
“EL HUNDIMIENTO DEL TITANIC” (1953) de Jean Negulesco
De todas las versiones que se han hecho, la del director Jean Negulesco destaca por la conocida habilidad del realizador para la dirección de actrices. De esta forma, destaca sobre todo el complejo trabajo de Barbara Stanwyck, una de las actrices de mayor personalidad del Hollywood clásico.
Este film está basado en las narraciones de varios de los supervivientes, algunos de ellos my celebres a nivel internaciona. Sobre este material trabajaron guionista, entre los que se encuentra Charles Blackett, uno de los más prestigiosos de Hollywood, que también es el productor del filme. Su excelente trabajo de escritura junto a Walter Reisch y Richard Breen se hizo merecedor del Oscar en la categoría de mejor guión.
Este año 2012 a 100 años de la tragedia se recuerdan hechos dejando incertidumbres desde la partida en viaje el
10 de abril de 1912, el Titanic abandonó el puerto de Southampton, Inglaterra, con rumbo a Nueva York. Cinco días después se hundió en las aguas del Atlántico, que se convirtieron en el cementerio de más de mil personas y el barco al que la prensa consideraba “prácticamente insumergible”. La noticia conmovió al mundo, que comenzó a rodear el misterio sobre el hundimiento con rumores y teorías, con villanos y héroes.
Era el principio de una leyenda. Han pasado 100 años, pero el Titanic sigue siendo una de las tragedias más famosas de la historia.
“La novela perfecta”, describió el cineasta James Cameron el hundimiento del Titanic, que llevó a la pantalla grande en 1997.
El primer viaje del Titanic era el último del capitán Edward John Smith quien, a sus 62 años, parecía estar listo para retirarse. Tanto él como el dueño del barco, J. Bruce Ismay, querían que fuera un viaje perfecto. A bordo del buque viajaban unas dos mil 228 personas, según los recuentos más aceptados entre tripulantes y pasajeros.
Todo marchó bien hasta la noche del 14 de abril. Los oficiales en el Titanic habían recibido advertencias sobre la existencia de icebergs en la zona. Smith, quien ese día fue homenajeado con una cena en su honor por los pasajeros de primera clase, dejó instrucciones al primer oficial, William McMaster Murdoch, de estar atento. Y se fue a dormir.
El Titanic estaba a la altura de la isla de Terranova, en el Atlántico.
A las 11:40, Frederick Fleet, primer vigía, lanzó un grito: ¡Iceberg al frente! Era el principio de la pesadilla.
Lo que ocurrió a partir de ese momento se sabe por los testimonios de los poco más de 700 sobrevivientes, Fleet e Ismay incluidos, durante la investigación del accidente, pero también por las investigaciones que han hecho expertos desde entonces. El hallazgo de los restos del Titanic, en 1985, sirvió para comprobar algunas teorías, tanto como para renovar el interés por la famosa embarcación.
Al escuchar el grito de Fleet, Murdoch habría dado la orden de parar el barco. Pero el iceberg estaba demasiado cerca y, con tan sólo unos minutos para reaccionar, el primer oficial ordenó virar a estribor (derecha). El iceberg chocó contra el Titanic y le abrió una brecha en la línea de flotación en el estribor de seis secciones. El barco comenzó a llenarse de agua de inmediato. La orden de cerrar todas las puertas de contención de agua no sirvió de nada.
Mientras Smith organizaba la evacuación en medio de un escenario caótico, armando incluso a la tripulación para evitar un motín, y basándose en la regla de “mujeres y niños primero”, el Titanic se hundía. Lo impensable ocurrió. El barco se partió en dos y se hundió por completo dos horas y 40 minutos después, la madrugada del 15 de abril. Con él se hundió casi 70% de la gente que iba a bordo, incluyendo al capitán, al primer oficial y más de 200 tripulantes. La mayoría, se cree, murió de hipotermia, en un lugar donde las temperaturas eran inferiores a los menos dos grados centígrados.
Los sobrevivientes fueron rescatados cuatro horas después, el tiempo que se tardó el barco Carpathian en llegar a la zona de desastre, tras responder a la llamada de auxilio.
Incógnitas
Días después, al llegar a Nueva York, los sobrevivientes fueron interrogados por una comisión creada para averiguar por qué ocurrió aquella tragedia. ¿Pudo evitarse el choque? ¿Cómo era posible que los vigías no detectaran antes un iceberg gigante? ¿Por qué los botes salvavidas no iban a toda su capacidad?
El choque era inevitable, dada la velocidad a la que iba el barco y la corta distancia que lo separaba del iceberg. Pero los expertos coinciden en señalar que si el Titanic hubiera chocado de frente, el daño quizá habría sido menor, o por lo menos el buque hubiera tardado más en hundirse.
No faltaron quienes acusaron a los dueños y constructores del barco de haber usado materiales de baja calidad, en un intento por explicarse cómo un gigante de 269 metros de largo y 28.19 de ancho, con un peso de más de 46 mil toneladas, pudo hundirse de ese modo, y tan rápido.
Esta versión fue de inmediato desmentida por White Star Line (la naviera a la que pertenecía el barco) y, según investigaciones posteriores, se comprobó que los materiales utilizados en la construcción fueron de la mejor calidad. Al capitán Smith se le acusó de haber ordenado que el barco fuera a toda velocidad, en un intento por llegar antes de lo programado a Nueva York y cerrar con broche de oro su carrera. Las investigaciones revelaron que el Titanic viajaba rápido, pero nunca saliéndose de las normas.
La pregunta que más tiempo ha ocupado a curiosos y expertos es la de cómo nadie avistó a tiempo el iceberg. Una respuesta la dio este año el historiador Tim Maltin en su libro A very deceiving night (Una noche engañosa). Tras seis años de investigaciones, Maltin, mejor conocido por el libro Las 101 cosas que usted creía saber del Titanic… ¡pero no!, llegó a la conclusión de que las condiciones climáticas aquella noche causaron un fenómeno parecido al de un espejismo, por el que el mar parecería estar a la altura del horizonte. Con un cielo oscuro, era imposible que los vigías —que no llevaban binoculares— vieran nada, excepto que estuviera frente a sus narices. En otras palabras, el iceberg se volvió “invisible” a sus ojos.
La rapidez con que se hundió el Titanic estaría directamente relacionada con el daño que le causó el iceberg por la forma en que se estrelló con el barco, pero también con el rompimiento de éste, algo que estuvo en duda hasta que Robert Ballard, oceanógrafo, encontró el cementerio del Titanic, el 1 de septiembre de 1985.
Después se sabría que la Marina estadounidense financió la búsqueda a cambio de que Ballard hallara dos sumergibles nucleares, el USS Scorpion y el USS Thresher, hundidos, el primero en 1962 y el segundo seis años después. El Scorpion llevaba armamento nuclear, que quedó enterrado junto con el sumergible, y Estados Unidos quería asegurarse de que nadie —léase los soviéticos— se lo hubiera llevado.
Muchos se preguntaron por qué los botes salvavidas no iban llenos, y por qué no había suficientes para que todos se salvaran. Lo cierto es que bajo las normas de la época, el Titanic llevaba incluso más botes salvavidas (20, con capacidad para mil 178 personas) de los que la ley le obligaba. Durante su testimonio, Charles Lightoller, segundo oficial del Titanic, señaló que existía el miedo de que los botes se desplomaran al ser bajados al mar si se llenaban al máximo.
Una vez concluidas las investigaciones, se decidió establecer una Patrulla Internacional del Hielo (IIP, en inglés), para monitorear la presencia de icebergs y elaborar nuevas reglas de seguridad marítimas, vigentes hasta hoy, bajo la Convención Internacional para la Seguridad de la Vida en el Mar.
Héroes y villanos
Esta “novela perfecta” no estaría completa sin su dosis de héroes y villanos.
Entre los primeros, uno de los más reconocidos es el diseñador del Titanic, Thomas Andrews, de quien se dice que al darse cuenta de que el buque naufragaría se dedicó a ayudar lo más que pudo y se hundió junto con su más grande orgullo.
Están también los músicos del Titanic, que no dejaron de tocar hasta que el agua se los tragó. Nearer my God to Thee (Cerca de Ti, Señor, escrita en el siglo XIX por Sarah Flower Adams) es la melodía que los sobrevivientes recordaron haberles escuchado.
La mayoría de los demás héroes son hoy rostros sin nombre, que cedieron su lugar para que otros se salvaran.
Más conocidos son los “villanos”. El primero es Ismay, a quien la prensa de entonces tachó de “cobarde” por haber abordado un bote pese a que aún había mujeres y niños a bordo del barco.
La mala reputación lo persiguió el resto de su vida, a pesar de que, según algunos testimonios, Ismay esperó a que ya no hubiera más mujeres ni niños en el lado del barco donde él estaba, antes de abordar.
Peor fama se ganó Robert Hichens, el cabo británico que estaba a cargo del timón y quien dio el viraje que hizo chocar al Titanic (incluso se le acusó de haber interpretado al revés la orden de Murdoch, cosa que ha sido descartada). Luego, quedó a cargo del bote salvavidas número seis, y de acuerdo con la gente que viajaba con él —incluyendo a la famosa millonaria Margaret Molly Brown—, se negó a recoger supervivientes que habían caído al mar. Años después, intentó asesinar a un acreedor, por lo que pasó tiempo en prisión. Murió en 1940 de un infarto, a bordo del barco English Trader.
El USS Californian es el barco que pasó a la historia por haber desoído los llamados de auxilio del Titanic, estando más cerca de éste que el Carpathian. La tripulación dijo no haber recibido indicios claros de que el Titanic estuviera en peligro.
El Titanic se llevó al fondo del mar muchos secretos. Seguramente algunos serán desvelados por investigadores y por nuevas tecnologías. Pero otros se quedarán enterrados allí, en ese cementerio de arena, agua salada y algas. La leyenda del Titanic, el insumergible que no lo fue, seguirá viva.
Para saber
¿Cuáles son los mitos?
La maldición de la momia. Durante mucho tiempo se dijo que uno de los pasajeros del barco llevaba consigo una momia egipcia, la de la princesa de Amon-Ra o sacerdotisa de Amon-Ra, llamada también la “momia de la mala suerte”, causante de infortunios a todo el que la poseyera. El pasajero desoyó los consejos y la adquirió.
La maldición, así, habría alcanzado al Titanic. No hay ninguna prueba que sustente esta versión. A bordo del trasatlántico, se sabe, los pasajeros de primera clase llevaban diversos lujos, incluyendo un auto, pero nada parecido a una momia.
La teoría del complot. ¿El hundimiento fue provocado? Esta versión cobró fuerza tras la publicación del libro Titanic: The Ship that Never Sank? (Titanic: ¿El barco que nunca se hundió?), de Robin Gardiner. Según esto, el Titanic nunca se hundió. Fue su buque hermano, el Olympic, cuyos dueños querían hundirlo a propósito para poder cobrar un seguro millonario, en vista de que este barco había quedado dañado tras una colisión, en septiembre de 1911. Nada ha validado esta afirmación; al contrario, cuando se encontraron los restos del Titanic, llevaban inscritos el número de construcción correcto, el 401. El del Olympic era 400.
La tragedia anunciada. Hubo personas que, habiendo pagado su boleto, decidieron no abordar el Titanic, alegando que videntes les informaron que el barco se hundiría. Más allá de eso, se desató un gran interés por un libro de 1898 donde se contaba una tragedia muy parecida... demasiado.
Se trata de la novela Futility, (traducido como Inutilidad, pero también como Vanidad), de Morgan Robertson.
En ella se narra el hundimiento del Titan, un trasatlántico considerado insumergible, y que se estrelló contra... un iceberg. Y al igual que el Titanic, el Titan no llevaba suficientes botes salvavidas para salvar a todos.
Casa Bonhams
Subastarán boleto e informe del navío
NUEVA YORK, ESTADOS UNIDOS.- Un boleto de entrada para la presentación del Titanic y un menú de la primera clase se encuentran entre los objetos relacionados con el trasatlántico que serán subastadas este mes, 100 años después de que el barco se hundió tras chocar con un témpano.
La subasta de la casa Bonhams del 15 de abril también incluye un informe manuscrito de Arthur Rostron, el capitán del Carpathian, el primer barco que llegó al lugar del desastre tras escuchar la llamada de auxilio del Titanic.
La carta, que se estima podría venderse entre 90 mil y 120 mil dólares, ofrece “un relato y una cronología completa de lo que ocurrió desde el momento en que el Titanic chocó con un témpano hasta que se hundió el barco”, dijo Gregg K. Dietrich, experto en arte marítimo.
Casi todos los 88 documentos y objetos están relacionados con la tripulación o los pasajeros a bordo del barco, así como con el accidente ocurrido la madrugada del 15 de abril de 1912.
El boleto preferente para la presentación del barco está fechado el 31 de marzo de 1911 y es “el único ejemplo conocido de un comprobante de admisión intacto”, dijo Dietrich. Se estima que podría venderse de 50 mil a 70 mil dólares.
Han pasado 100 años, pero el Titanic sigue siendo una de las tragedias más famosas de la historia.
******************************************************************************************************************************************************************